Uno de los 50 chilenos más creativos y el primero en presentarle sus creaciones a la ex editora en jefe de la revista Vogue.

Nació en Punta Arenas en 1992, estudió publicidad y en 2018, después de haber realizado un intercambio en Central Saint Martins de Londres, fundó su propia marca.

Pero, ¿Cómo llega un publicista a dedicarse a la moda? o más aún, ¿a estar cara a cara con Anna Wintour e incluso sacarle una sonrisa?

En Somos La Percha conversamos con el diseñador chileno Guido Vera sobre sus primeros pasos en esta industria, aquello que lo inspira y su innovación en cuanto a diseño, materiales y sostenibilidad.

Sus orígenes, su inspiración

Su colección más reciente es “Cuerpos de Agua”, volumen VII. Por supuesto, está relacionada con la Patagonia, pero según nos comentó, tiene un vínculo especial con el documental de Raúl Zurita “Botón de Nácar”, que narra la historia de los Selknam.

Las prendas se presentan como reinterpretación del documental que desde sus inicios lo ha influenciado, reinterpretándolo en cada tomo e incluyendo guiños cada vez más internos.

“Es un documental que aborda cómo (los Selknam) ellos se relacionaban con su entorno, sobre todo con el agua… eran nómadas”, comentó el diseñador, agregando que tenían “esa relación con el entorno porque lo tenían de frente”.

Colecciones minimalistas y conectadas entre sí

Con siete volúmenes, uno por año, el diseñador se ha encargado de reinterpretar, incluso, sus propias creaciones. Cada colección nutre a la siguiente y así.

Hay productos que, a pesar de haber salido en la primera entrega, vuelven a salir, se reinterpretan con nuevos materiales o técnicas. Aún así, contando un mismo relato.

Y mientras el minimalismo define la silueta de las prendas, el agua y el desierto patagón también las curte.

“Mis abuelos viven en Bariloche y ese viaje entre Chile-Argentina es algo que hice durante 17-18 años de mi vida. Era un viaje en tierra de dos días donde estábamos nosotros y el desierto. Fueron varios años de carretera, de ruta, que se cruza con esta idea de lo funcional”, mencionó Vera, explicando que sus vivencias fueron el puente para poder crear y diseñar.

Su influencia no viene de las capitales de la moda, sino que lo que lo inspira a diseñar no es lo que pasa acá, en su propia cultura.

En sus palabras, “cuando uno no entiende su contexto cae en la imitación”, siendo esa autenticidad la misma que lo llevó al otro lado del mundo, a presentarse en París o Qatar.

Slow fashion, sostenibilidad y prendas de bajo impacto ambiental

Ante la pregunta: “¿Es difícil crear moda realmente sostenible desde Chile?”, Guido respondió que, en realidad, la palabra sostenibilidad “es un viaje que no termina”. Complementando con la idea que “aquello que era sostenible hace 10 años, hoy no lo es”.

Para Vera, la verdadera sostenibilidad radica en el diseño a baja escala, en entender los procesos, conocer los proveedores, los talleres y vinculándose a ellos.

Incluso, buscando telas o materias primas en todo Santiago, porque otro punta fundamental en la visión del chileno es rescatar materiales que, quizás, han sido desechados.

“Ahora voy a volver a la lana, pero igual a lanas antiguas, vintage. Las que a mi me interesa utilizar son del periodo de un periodo histórico que corresponde a la pre y post dictadura, de los 90”, dijo, explicando que se trata de materiales cuyo impacto hoy es cero.

Al menos, visto por un Ingeniero en Medio Ambiente “en el fondo, su impacto ya se fue hecho”, comentó Vera, quien está dentro de los 50 chilenos más creativos debido a su innovación en cuanto al cuero vegetal.

“Hemos trabajado con cuero de cactus, manzana y ahora también con maíz”, adelantó.

Del fin del mundo a Qatar y conocer a Anna Wintour

Casi como un golpe de suerte o, mejor dicho, como un reconocimiento a su talento, fue a presentarse al “Years of Culture” en el M7 de Qatar. Un encuentro que destaca y reconoce el arte, el diseño y la cultura de Chile y Argentina.

Pero en realidad, el viaje sí fue casi fortuito. Trama Cultura, una marca y proyecto de gestión cultural del gobierno chileno lo postuló como representante nacional y lo demás se convirtió en un hito digno de ser documentado.

“Nunca nos preguntaron nada, simplemente nos postularon, compraron los pasajes, se encargaron de la estadía, de todo”, reveló Vera.

Y fue en esa vitrina donde conoció a Anna Wintour, Anna Dello Russo, Giorgia Tordini, Alessandra Ambrosio y Jonathan Anderson. Esto, debido a que en paralelo al “Years of Culture”, habían otras cinco exposiciones en el edificio catarí.

“¡Todo era demasiado delusional! Era como: ‘¿Qué ¿Qué hacemos aquí?’, muy extraño. Por supuesto, ella pidió hacer el recorrido en privado y andaba con una chaperona o amiga que fue quien nos ayudó a dialogar, porque su hermana vivía en Bariloche”, expresó el diseñador.

Además, contó que “Anna no conversó con todos, pero conmigo estaba chocha” y que, hasta le sonrió. Igualmente, reveló que parte de la conversación se centró en sus estudios como publicista, su trabajo e inspiración. Una que, por supuesto, tanto Anna como su chaperona lograban entender y visualizar.

Un hito en la carrera de Vera, quien con tan sólo 33 años, ya se posiciona como uno de los diseñadores chilenos más destacados y cuya visión de la moda está enraizada de la realidad política, social y cultural del contexto en el que creció.

Con prendas minimalistas y funcionales, el diseñador reinterpreta la historia del lugar donde nació y creció bajo un aspecto que lo posiciona en actualidad, con materiales innovadores y con un respeto por la naturaleza y la especialización que lo hacen único.

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