Nicoletta Valentina: la diseñadora chilena que convirtió su historia familiar en moda con identidad
Desde probarse vestidos a los 8 años a tener su propio taller de ropa, Nicoletta Valentina redefine la moda con humor, memoria y mucho carácter. En sus prendas conviven el diseño con la historia de su abuela, su embarazo y una creatividad sin miedo.
Con una estética que mezcla lo urbano con lo artesanal, lo sentimental con lo vanguardista, la diseñadora Nicoletta Valentina se ha consolidado como una voz singular dentro de la moda chilena. Pero más allá del diseño, lo que hace especial a su marca es que cada prenda tiene una historia, una conexión emocional y, muchas veces, un origen familiar.
Una marca nacida de la unión
Nicoletta no solo viste cuerpos: viste vínculos. La diseñadora creó su marca con la idea de que la ropa puede contar historias —y la suya comienza con su abuela Verónica López, a quien llama cariñosamente “la nona”.
Su relación es parte central del universo Nicoletta Valentina: desde compartir prendas y rutinas hasta inspirarse mutuamente para crear una moda honesta, adaptable y con sentido.
Aunque su estética destaca por lo audaz y dramática, en el fondo está guiada por un principio simple: que las prendas hablen de ti.
De Italia a Barrio Italia: la historia de una diseñadora autodidacta
Nicoletta Valentina, nacida como Nicoletta Olivares, descubrió su amor por la moda desde pequeña, probándose y modificando vestidos que su madre traía desde Estados Unidos. A los 8 años escondía vestidos bajo su cama para modelarlos en secreto, y en la escuela empezó a incursionar en la modificación de prendas que sus primas se peleaban por tener.
Esta pasión la llevó a estudiar en 2005 en la prestigiosa Accademia Costume & Moda en Italia. Sin embargo, su camino como diseñadora comenzó realmente cuando abrió una pequeña boutique en Barrio Italia, Santiago, donde revendía ropa importada de Brasil.
Todo cambió cuando no pudo seguir pagando el arriendo de su tienda. Decidió entonces crear su propia línea de ropa, utilizando una máquina de coser comprada en cuotas y tutoriales de YouTube. Su primer vestido, sin cierres ni botones, causó furor entre sus futuras clientas.
Desde ese momento, Nicoletta Valentina se convirtió en una marca de diseño 100% propia y original .
Moda con humor, tallas reales y sentido común
Una de las razones por las que la comunidad ama a Nicoletta Valentina —aparte de sus maravillosos diseños— es por su sinceridad. Tanto en su tienda como en redes sociales, Nicoletta y su abuela aparecen mostrando looks y comentando sin filtro frases como "esa talla no es tuya" o "te queda espectacular". Lo que podría parecer una simple broma, se convierte en una crítica al discurso vacío de la moda: acá no hay promesas falsas, sino ropa que se adapta a cuerpos reales, con diseños pensados para acompañarte en todas las etapas de la vida.
Porque al final, todo depende de la actitud.
“Ahora mismo estoy embarazada y todo”, explica Nicoletta, “pero me ponga lo que me ponga, me siento regia, estupenda, a pesar de que obviamente no tengo mi cuerpo como antes... Y eso lo aprendí de ella”.
Un vestido, una historia
Detrás de cada pieza de la marca hay una anécdota, pero hay una prenda en particular que resume a la perfección el espíritu Nicoletta Valentina: un vestido creado a partir de una polera Harley-Davidson intervenida con retazos de seda, broches metálicos y una falda de tela fluida.
“Este vestido, que era de mi mamá…”, empieza a contar Nicoletta antes de mirar a su abuela. “¿Se lo robaste a mí mamá?”.
“No, pero por favor”, responde la nona inidgnada. “Me lo regaló”, nos explica ella antes de recordarle a Nicoletta el momento en que el vestido se transformó en un símbolo de su marca.
La historia parte cuando Verónica lo usó para un desfile que organizó Nicoletta en el Parque Arauco. “Y yo causé sensación con el vestido”, dice con orgullo. Pero fue su nieta quien se enamoró finalmente de la prenda y decidió transformarla en algo especial.
"Y yo lo vi y dije… “No, me enamoré” (…). Es un vestido que tiene onda, me encantó y es mi prenda favorita (…) No te lo devuelvo más, es mío ahora", confiesa entre risas. Una frase que bien podría ser el manifiesto de la marca: moda sin reglas, sin edad y con mucha personalidad.
Una diseñadora con sello propio
Desde sus comienzos, Nicoletta Valentina ha demostrado que la moda no necesita ser pretenciosa para tener peso. Basta con una historia bien contada, telas reutilizadas y una buena dosis de ingenio. Hoy, su marca es sinónimo de libertad creativa y cercanía: una oda a las mujeres que se visten como quieren y que, como ella, encuentran en la ropa una forma de heredar amor, memoria y estilo.