“Buenos genes”: la campaña de American Eagle con Sydney Sweeney que se volvió una pesadilla mediática
La actriz de Euphoria protagoniza un spot que mezcla estética, ironía y mensajes cuestionados en redes sociales. Mientras la marca dona ganancias a una fundación, la crítica apunta a un eslogan problemático en un país con tensión política.
Créditos: Instagram @americaneagle
Lo que parecía una simple campaña de jeans terminó con acusaciones de “propaganda nazi”. ¿Qué pasó realmente con American Eagle, Sydney Sweeney y ese juego de palabras que se les fue de las manos?
Todo comenzó con un anuncio en el que Sweeney —blanca, rubia y de ojos azules— protagoniza una serie de clips en tono irónico para la marca American Eagle.
Luego vino la polémica: la frase “Sydney Sweeney tiene buenos genes” apareció tachada y reemplazada por “jeans”. En otro video, Sweeney explica que “los genes determinan rasgos como el color de ojos o la personalidad” y cierra diciendo: “mis jeans (o genes) son azules”.
Créditos: Instagram @americaneagle
Hasta ahí, parece un juego de palabras. Pero para muchos fue más que eso:
Críticos en redes sociales, artistas como Doja Cat y hasta académicas en TikTok señalaron que la campaña refuerza narrativas eugenésicas y eurocéntricas, en un momento político especialmente tenso en EE.UU. Con una belleza de mujer blanca típicamente aceptada, la sesión de fotos que tuvo Sweeney con un Pastor Alemán incluso dieron lugar a que se tachara a la campaña de “nazi”.
Usuarios calificaron la campaña de insensible, considerando también que pretendía generar conciencia sobre la violencia doméstica, donando las ganancias del jean edición limitada "The Sydney Jean" a la fundación Crisis Text Line.
Sin embargo, entre todas estas críticas, la más debatida por los usuarios de redes sociales es la sexualización de la actriz durante la campaña, generando comentarios que cuestionaban si American Eagle estaba “vendiendo jeans a las mujeres o mujeres en jeans para los hombres”.
A pesar de todo esto, las acciones de American Eagle subieron un 15% tras la polémica. ¿Error inocente o jugada de marketing provocadora? Nadie lo ha aclarado aún, porque ni la marca ni Sweeney han respondido a las distintas acusaciones de los internautas sobre esta nueva campaña.