Las Princess Nails llegaron para quedarse: cortas, discretas y naturales
La tendencia que se impone este 2025 apuesta por la elegancia, la sutileza y, como su nombre lo indica, unas uñas dignas de princesa.
Hace tiempo que las uñas dejaron de ser solo una parte del cuerpo: hoy son un accesorio más del outfit. Llevarlas arregladas se ha convertido en un básico, una forma de expresión donde el diseño, los colores y la forma dicen tanto como un buen par de zapatos.
Durante los últimos años, las formas almendradas y cuadradas dominaron la tendencia. Aunque distintas entre sí, compartían un mismo espíritu: el maximalismo. Largas, con diseños llamativos, relieves, charms, acabados perlados o francesas reinventadas… todo valía.
Hoy, sin embargo, el minimalismo ha vuelto con fuerza. Y con él, una nueva estética que se impone con elegancia: las Princess Nails o uñas princesa. Cortas, naturales, discretas, pero perfectamente cuidadas. Esta tendencia no solo responde a un cambio de estilo, sino también a un contexto: refleja tanto la situación económica como el resurgimiento del conservadurismo en la moda, como indican distintos estudios.
Qué son las Princess Nails (y qué tienen que ver con la economía)
Imagina uñas cortas, limadas con precisión, en tonos nude, rosa suave o con un simple brillo natural. Eso son las uñas princesa. Una manicura sutil, sofisticada, inspirada directamente en figuras de la realeza como Kate Middleton, princesa de Gales.
Más allá de lo estético, esta tendencia está profundamente conectada con el momento económico. En tiempos de incertidumbre global, muchas personas están reconsiderando sus gastos y optando por alternativas de menor mantenimiento.
En TikTok, el término recession nails (uñas de recesión) se ha viralizado como una forma de describir este fenómeno: uñas más cortas, simples y menos costosas de mantener, que evitan los constantes retoques en el salón.
Cómo son (realmente) las famosas Princess Nails
Las uñas de princesa se definen por su largo corto, forma natural y terminación cuadrada suave. Se inspiran en las manicuras clásicas y atemporales de la realeza: la manicura francesa nude de los 90 que usaba la princesa Diana, el acabado rosado y discreto de Catalina de Gales o el estilo californiano de Meghan Markle. También destaca la icónica manicura rosa pálido de la reina Isabel II, creada con el tono Ballet Slippers de Essie.
¿El común denominador? Tonos suaves, lechosos, nudes, transparentes o rosados pálidos. Una estética pulida, sencilla y elegante que –como toda tendencia poderosa– dice mucho con muy poco.
¿El común denominador? Tonos suaves, lechosos, nudes, transparentes o rosados pálidos. Una estética pulida, sencilla y elegante que –como toda tendencia poderosa– dice mucho con muy poco.
Minimalistas, elegantes y fáciles de mantener, las Princess Nails no solo están marcando el ritmo de la moda en 2025, también nos recuerdan que a veces, menos es más. Una tendencia que combina practicidad con estilo y que, sin duda, llegó para quedarse